sábado, 16 de mayo de 2020

Cualidad redentora de la atención del Altísimo


" Muchas son las aflicciones del justo,
pero de todas ellas le librará Jehová. "

Salmo 34: 19


   Amado Padre, con actos de alabanza glorificamos tu nombre. Bendito Jehová, sabemos que escuchas el clamor de tu pueblo, el cual encuentra en tu presencia la salvación.

   La unión de Dios para con su creación es un vínculo sensible que nutre desde su responsable afectividad: puesto que es su rebaño lo cuida amorosamente, procurando que no carezca de nada. Expresado de otra manera, ir al encuentro personal con el Altísimo mediante la comprensión de su palabra constituye la única necesidad imperiosa que tiene cada ser humano, y cuando éste arriba a esa profunda comunión Padre / Hijo,a  su amor suple todas sus carencias, su consuelo calma cualquier pesar. En su misericordia lo bendice con un estado de plenitud o asistencia angelical: " Cercano está Jehová a los quebrantados de corazón; y salva a los contritos de espíritu " (Salmo 34: 18).

   Para robustecer la cohesión con su congregación, el Padre celestial precisa de la misma una expresión pacificadora, de hecho, el lenguaje de la paz es su eterno pacto con la humanidad: " Apártate del mal, y haz el bien; busca la paz, y síguela " (Salmo 34: 14). Todo lo que podamos decir debe servir a este propósito. Hablar limpiamente, verazmente, sin deseos de dañar o desorientar al prójimo mas sí desde una noble intencionalidad pacifista, nos aproxima a su reino.

   No olvidemos que Jehová protege la composición interior de sus fieles e íntimamente le desagrada que deliberadamente se les ocasione aflicción ya que es su comunidad espiritual, siempre atendida desde su cualidad redentora, y por ser el principal asiento de su fe le confiere la eterna salvación. Crezcamos por dentro para ser merecedores de esa bendita gracia, la de habitar para siempre en su tierno regazo.

Duinka Leal

viernes, 1 de mayo de 2020

Tus talentos, lo más fecundo que hay en ti


   Descubrir cada uno de tus talentos es aprender a valorar ese inmenso sol que debes hallar dentro de ti, lo que te permitirá brillar por tus aportes a la humanidad. Dios te ha concedido con todo su amor apreciables capacidades las cuales tienes que honrar, ya que con ellas puedes hacer grandes cosas, convirtiéndote en un creador de experiencias bien constructivas que serán méritos propios, tus razones de alegría, orgullo e interna gratitud al Altísimo, por haber creído en ti. Con paciencia, perseverancia, entrega y amor cultiva siempre tus talentos, como quien cuidadosamente riega una planta y al verla florecer se complace con la recíproca respuesta de la naturaleza, al devolver así su tierno abrazo.

   Siéntete dueño de tus sueños, creados a partir del conocimiento de tu potencial.

   Aprecios y mil bendiciones,

Duinka Leal