Mujer, de cara al siglo XXI

 

Eleanor Roosevelt, gran impulsora de los derechos de la mujer

 Vista como el sensible baluarte de la familia; el símbolo indubitable de servicio y entrega; o la gran personalidad que ha sabido ganarse un espacio en la sociedad desde su valioso desempeño, la mujer es la parte de la humanidad llamada a proseguir a dar más de sí misma en este exigido siglo XXI, caracterizado por vastas transformaciones globales con repercusiones nacionales de suma importancia. 

 Cualidades esenciales de la mujer 

* Natural sensibilidad: El sexo femenino es, sin duda, el lado sublime del mundo asociado a las cosas afectivas delicadas, de sutil composición y frágil emotividad.  

* Espiritualidad: Por lo general, la mujer lleva internamente una profunda y consistente búsqueda de Dios. El cultivo de la fe religiosa; la oración disciplinada privada o en comunidad; y la asistencia a templos, casas de oración, iglesias, células, salones del reino, sinagogas o mezquitas presentan en numerosa proporción la asistencia de devotas señoras quienes asisten para lograr allí su comunión con el Altísimo. 

 * Fecundidad: La mujer es indefectiblemente la madre por naturaleza. Ese trascendente honor concedido por el Señor la convierte en el eje medular en el cual gira la familia, matriarcal por excelencia. 

 * Intuitiva inteligencia: La comprensión de la mujer reside en las respuestas reflexivas surgidas desde su espíritu, ese pedacito de Dios que hay en cada corazón humano. No solo se sustenta en el análisis estrictamente racional de cada experiencia, más bien pretende producir un nuevo orden más satisfactorio surgido desde lo hondo del alma.  

* Alto desarrollo: Otrora un ser pasivo dependiente emocional, material y socialmente del hombre la mujer es actualmente un ser eminentemente protagónico con suficiente liderazgo para guiar sus propios procesos en los diferentes ámbitos de desenvolvimiento dentro del Estado y la sociedad en los cuales coexiste.

  

 Evolución actual de sus derechos 

Desempeña roles de relevancia 

 A partir de la creación de la Declaración Universal de los Derechos Humanos por Naciones Unidas (*), los derechos de la mujer son establecidos al mismo nivel de los de los hombres y niños, es decir, como la entera humanidad. El principio de insoslayable igualdad que posee se destaca en un plano muy general, importante comienzo que marca la elaboración posterior de una vasta serie de documentos legales los cuales tratan con mayor precisión sus derechos como individuos. 

 Sin embargo, es oportuno mencionar algunos de los derechos que aparecen en esta declaración:

* El derecho al respeto en su dignidad y derechos fundamentales como debe serlo toda persona humana, sin ninguna forma de discriminación. 

* El derecho a la vida, a la libertad, a la seguridad; a la libre expresión de pensamiento y opinión; a la educación, a la cultura, a la recreación y a la protección de sus derechos de autor. 

* El derecho a la educación, al trabajo, a la creación de asociaciones que las defiendan, a su profesionalización.  

* El derecho al debido respeto por su honor. 

* El derecho al voto para elegir a sus autoridades ante el Estado. 

 Absolutamente todos los derechos tomados en cuenta en este valioso documento son escritos en forma integral, englobando a toda la familia humana, lo que lo hizo imperecedero. 

 Ya en este siglo XXI han surgido nuevas documentaciones que abordan los derechos de la mujer de una manera más exhaustiva y específica como por ejemplo los "Derechos Humanos de las Mujeres..." (**) la cual es una Guía Práctica que presenta una clara metodología que persigue defenderla aplicando el Derecho Internacional especializado en esta materia. 

 El mencionado instrumento basa su fundamentación legal en las aportaciones realizadas por las constituciones de cada Estado, los tratados internacionales establecidos y el Derecho Internacional Consuetudinario. Destinado a producir los logros significativos a los que ha sido creado, contribuye a simplificar los procedimientos de abordaje de casos concretos de alteraciones sustantivas a las mujeres bien sea por desapariciones forzosas, detenciones arbitrarias, evidentes violaciones, víctimas de la intolerancia religiosa, racial o étnica, violencia, xenofobia, conflictos armados, estados de guerra, entre otros hechos punibles internacionalmente. 

Ejemplo de servicio y vocación 

 Por otra parte, fue creada en Venezuela la "Ley Orgánica sobre el Derecho de las Mujeres a una vida libre de violencia" (***) la cual pretende fomentar una cultura generalizada a favor de la mujer y sus derechos en aras de producir un orden social más justo, participativo y protagónico en todos los niveles y contextos existentes en el espacio territorial venezolano. 

 La referida ley además de describir las diferentes formas de violencia institucionaliza una variedad de programas asistidos por el Estado a objeto de coadyuvar a que a través de una adecuada formación ciudadana se le dé a la mujer el valor social que merece tener. En este sentido, los medios de comunicación, la cultura y los centros de enseñanza presentan un papel estelar debido a su importante influencia en la transmisión de componentes culturales afines a este noble propósito.  

 La mujer venezolana, afrontando su vida en un país sancionado 

 Es por casi todos conocido que Venezuela es actualmente una nación sensiblemente afectada a consecuencia de las sanciones emitidas por los Estados Unidos. Esas medidas, que llevan varios años, tienen repercusiones en toda la extensión del país lo que incide más en la pérdida de la calidad de vida de millones de pobladores, con un notable énfasis en mujeres, niños y ancianos. 

 La mujer venezolana hace esfuerzos extraordinarios para afrontar esta crítica experiencia. Participa en jornadas sociales coordinadas por entes gubernamentales, iglesias o instituciones impulsadoras de procesos comunitarios a beneficio de los más necesitados. Igualmente fortalece su alma asistiendo a actividades religiosas, círculos de oración o lecturas bíblicas grupales lo que la llena de fe en Dios incrementando la resiliencia necesaria para sobrellevar estas duras circunstancias. Estados Unidos debe levantar sus sanciones priorizando la trascendencia histórica de su relación binacional con Venezuela.

Los programas humanitarios deben fortalecerse

 Personalmente he creado mi Programa "Fraternos", el mismo consiste en la producción de tortas para la rutina diaria, cumpleaños o celebraciones dedicadas especialmente a familias que atraviesan una muy difícil situación. Tienen un gran valor nutricional, las hago con inmenso cariño, dedicación y espíritu de sacrificio. Actualmente existe en Venezuela un relevante auge del emprendimiento social. 

 Visión centrada en la mujer como causal del fin de las guerras 

Queremos el fin de las guerras 

 Desear el cese de los conflictos bélicos y la paz definitiva en los pueblos del Medio Oriente, Asia Central, así como en otros lugares del mundo representa mirar con profunda consideración a la mujer árabe o persa quienes han sufrido enormemente los durísimos efectos de los inclementes estados de ocupación militar. 

 Las señoras de Siria, Afganistán, Palestina han tenido que enterrar a sus hijos y a otros parientes; han padecido de condiciones críticas e insalubres; han sufrido de enfermedades, hambre y sed; también han pasado a ser parte de millones de refugiados o desplazados que dejan atrás sus pertenencias viendo su hábitat destruido o semidestruido por los bombardeos. Tanto dolor, duelo y desasosiego deben quedar en el pasado partiendo del reconocimiento de los derechos de la mujer a vivir en paz en su espacio territorial. 

 Con respecto a la situación de guerra en Gaza, Palestina/Israel es imperioso: 

* Lograr un inmediato cese al fuego 

* Facilitar la ayuda humanitaria mediante corredores humanitarios seguros 

* Impedir un mayor colapso social en los poblados afectados 

* Liberación de rehenes y los prisioneros de guerra para que vuelvan a sus respectivos hogares 

* Suspender las incursiones militares 

* Promover el proceso de paz desde los medios de comunicación social y distintas redes sociales 

 Afortunadamente, dentro de pocas semanas será anunciado un plan que se está diseñando entre los Estados Unidos, Egipto y Catar el cual se propone la paz duradera entre Palestina e Israel con miras al establecimiento del Estado palestino, que será la más grande felicidad de sus ciudadanos y amigos de esa nación. 

 Ciertamente, sería utópico plantearse la paz en los suelos del Medio Oriente si no se toma en cuenta la posición del Estado de la República Islámica de Irán. Este gran país hoy en día presenta un importantísimo desarrollo nuclear con vastas instalaciones construidas en sus diferentes regiones, lo cual contribuye al reconocimiento de su importancia militar mundial debido a su alto potencial defensivo/ofensivo. Sabemos que desde su formación e idiosincrasia musulmana desean proteger, defender a sus pueblos y a los aliados de su civilización sobre todo luego del dolor infinito causado a sus mujeres y a sus niñitos durante esos severos conflictos militares transnacionales. No habrá paz absoluta sin la presencia de Irán en los acuerdos pacificadores de alcance planetario. Su increíble peso adquirido hace imposible su exclusión de las mesas de diálogos. 

 Para finalizar, es preciso reafirmar los indiscutibles derechos que tiene la mujer. La sociedad en pleno está obligada a considerarlas personas que merecen vivir en paz en sus espacios sin el temor a bombardeos de fuerzas de ocupación; a respirar tranquila la encantadora brisa en cada atardecer; a progresar de acuerdo con su labor productiva; a llevar felicidad a su familia; a su adecuada coexistencia comunitaria; a superar con éxito las difíciles etapas. En fin, a permitirles llevar su vida de acuerdo con los más elevados principios que hagan honor a su existencia. 

Duinka Leal

 

Irán, país esencial para la paz en el mundo 

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Referencias: 

(*) Naciones Unidas: "Declaración Universal de los Derechos Humanos (DUDH)". Nueva York, Estados Unidos, 1948. 

(**) Instituto Interamericano de Derechos Humanos: "Derechos Humanos de las Mujeres: Paso a Paso". Human Rights Watch, "Women's Rights Project". San José, Costa Rica, 2000. 

(***) Asamblea Nacional de la República Bolivariana de Venezuela: "Ley Orgánica sobre el Derecho de las Mujeres a una vida libre de violencia". Gaceta Oficial N° 38.668. Caracas, Venezuela, 2007.